PLAZA ARTE:

 Por: Ernesto Würth

 

El mundo actual

 

HABLANDO DE LOS PUEBLOS BÁRBAROS. CRÍTICA DE LA FORMA DE VIDA DE LOS TIEMPOS MODERNOS EN QUE VIVIMOS.

Harold pinter- Premio Nóbel 2005 literatura

 

Ayer, conversando con mi nieta mayor, a raíz de un comentario suyo acerca de los pueblos bárbaros, le conté, que nuestra familia en Germania (hoy Alemania) la comandó un tiempo largo, un capitán llamado Heinrich Würth, quien era jefe de Tribu de la entonces ciudad suiza de Saint Gobin. Era un feroz guerrero, y según los anales de esa época, asesinaban pueblos enteros en sus luchas de supervivencias.

 Mi nieta me miro horrorizada, pues sintió una pena e impresión de descender de tan brutal persona. ¿Tata…y mataba gente inocente?  Le expliqué que en esos tiempos la vida era así, y en Europa, dominaban casi el continente entero.

 Según un libro de familia que tengo, dicho capitán, se dedicaba a escribir sus memorias de guerrero,  y al mismo tiempo, escribía poemas que en ese tiempo se cantaban en tiempos de calma, alrededor de una fogata en el poblado que tenían, seguramente de carpas o algo parecido. “Menos mal que algo bueno y culto hacía nuestro pariente” me comento mi nieta.

Me dijo que ella habia estudiado en  Historia, lo concerniente a dicha época y que agradecía estar viviendo ahora en medio de ésta gran civilización.

 Le comenté, que para mí, la época de los pueblos bárbaros (se llamaban así pues significa extranjero, desconocido) ha continuado hasta el día de hoy, con muy pocas diferencias a mi juicio personal. Pero como puede decir eso Tata, la vida de hoy es diferente, no hay guerreros, nadie mata, vivimos en paz…….Claro le respondí, puede ser que acá donde vivimos sea así, pero también es relativo. Y te voy a explicar porqué.

No te niego que hoy día, estos tiempos en que vivimos, tenemos a la vista y uso diario de grandes adelantos, como ser la luz eléctrica, el gas, el agua potable, la televisión, radio, Internet etc. Tenemos autos y aviones que acortan distancias. Las noticias hoy se reciben en cualquier parte del globo, al segundo de ocurridas. En fin no te voy a negar que los tiempos han cambiado y que pareciera que esos pueblos bárbaros desaparecieron.

 ¿Pero  no crees tú, que aún conservamos el barbarismo de esos tiempos?...Para nada Tata, creo que el mundo esta cambiado.

 Mira nieta, fíjate en los miles de personas que mueren de hambre todos los años, o de enfermedades que arrasan pueblos enteros, en África, en ciertos lugares de Asia, acá cerca en nuestra misma América, cuantas injusticias de vida miserable,  cuanta pobreza…¿no crees que ello se acerca a la crueldad de los pueblos bárbaros? Mide la diferencia que hay entre la crueldad de esos pueblos bárbaros y lo que te estoy diciendo. Con la diferencia, que todos estos desastres actuales, los hacemos pueblos que nos creemos estar viviendo en la era moderna, pensando en que nuestra vida de hoy dista mucho de la del ayer. La economía de libre mercado, tan apetecida por una parte de cierta gente, comete terribles injusticias de desigualdades sociales.

Tenemos una guerra en Irak, originada por motivos netamente económicos, en la cual se han cometido genocidios terribles. Hace 60 años atrás, un señor Hitler, un bárbaro moderno, cometió los crímenes mas terribles de los últimos tiempos en las mismas tierra de Germania de nuestros antepasados, otro señor Stalin hizo lo mismo en Rusia, un señor Franco en España,  Mussolini  en Italia,  además de  las dictaduras en América del Sur. Cuanta gente inocente hizo se desaparecer, con el agravante que los motivos eran callar o amordazar las ideas que ellos no compartían.

 Detalles como estos querida nieta, me hacen pensar que los bárbaros siguen existiendo y en peores condiciones que en la antigüedad, pues como tu lo has dicho, en nuestra época hay avances tecnológicos que hacen aparecer al mundo, como viviendo una era especialmente feliz. Pero ello mismo, hace que el actuar del hombre, hoy día, sea peor que el de épocas pasadas. Hoy tenemos todo en nuestras manos para ser un mundo feliz.

 Pero la ambición humana, las economías de libre mercado existentes hoy día, han creado una selva artificial, en la cual el hombre se ha transformado en un bárbaro común y corriente que para ganar más;  le quita al de al lado la posibilidad de compartir las riquezas. Los economistas  que provienen de diversas capas sociales, a veces de las mas bajas, hacen ejecutar crueles sistemas de reparto de la riqueza de sus congéneres  negándoles la posibilidad de una  justa distribución de la riqueza.  Hoy día hay detalles, como la riqueza del petróleo, que crea guerras para obtener su control. En fin, donde miremos se cometen injusticias en desmedro de una parte de la población.

Como en los tiempos de tu antepasado que además escribía poemas para ser cantados, hoy existe la Prensa escrita, medio en el cual, los hombres pueden escribir sus prosas y poesías en protesta de las injusticias de hoy día, reunidos en Foros mundiales, que a veces nada pueden hacer para detener los Atilas modernos.

Creo que vale la pena meditar en los pueblos bárbaros, y reconocer, que el hombre aún lleva encima de él, los defectos evolutivos del pasado, y que si bien cambian en el aspecto exterior, en el interior están ocultas todas las maldades que nos hacen mirar el pasado, como algo superado, pero que lejos estamos de haberlo logrado.

 Finalmente quiero decirte nieta, que tu generación tiene que evolucionar hacia un mundo más  justo, más romántico, en el sentido de hacer imperar el amor entre los hombres. Te aconsejo que leas mucho, que participes en discusiones ambientales de tu entorno, que leas buenas prosas y te llenes de poesía, de la romántica y también de la que habla de las cosas sencillas de la vida, para hacerlas practicar por todos, que te harán llegar a tener un mundo mejor administrados por cada uno de los que vivimos en el.

 Perdónenme, que haya ocupado este lugar de critica de arte, para hacer otra crítica, al arte de vivir en paz y justicia social, de la cual dependemos todos por igual, quiéranlo o no. Estoy seguro que esto también es hacer poesía.

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